Y he aquí de nuevo,
vagando en el hielo,
dando golpes al unísono
palpitar muerto.
Y he aquí de nuevo,
Gritando en silencio,
guardando en la grieta
dolor siniestro.
Y he aquí de nuevo,
tendida en el suelo,
perdiendo la vida
Llorando de miedo.
Y he aquí de nuevo,
tragando mierda,
Olfateando muertos,
Y bebiendo lento.
Y he aquí de nuevo,
cabando profundo
ocultando mi cuerpo
pudriendome en lamentos.
El arma más letal, es la pluma que desenvainas al expresar tus pensamientos más íntimos
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